Crónica lunes 11 de agosto

Queridos padres, madres, abuelos, amigos y resto de peregrinos,

Hoy, al ser una etapa corta, nos hemos podido despertar un poco más tarde de lo habitual. Además, había café recién hecho en el desayuno y eso presagiaba una jornada que pintaba bien. Hoy, en la oración de la mañana, hemos meditado sobre la corrección fraterna y la necesidad de vencer el miedo a decir las cosas que estén bien. Durante el desayuno, nos ha visitado un pequeño zorrillo.

Pues al final ha resultado ser que la etapa "corta" no era tan "corta". Hoy tocaba subir de lo lindo, con trechos que te dejaban sin aliento pero que te permitían observar impresionantes paisajes desde lo alto de la montaña. Qué bien hizo Dios la creación. El Cor Ginesta ha pasado un buen rato de la etapa aprovechando para practicar las canciones que cantarán en Roma y la "pandilla del pitillo" seguía racionando colillas, que empiezan a escasear. Por cierto, tenéis que oír el nuevo hit del coro de chicas de la parroquia, el "Flogoprofen". Seguro que triunfa algún día. En principio la idea era hacer toda la etapa de una tirada, pero debido al fuerte desnivel nos hemos visto obligados a parar para hacer un segundo desayuno a modo de descanso.

El otro día os hablamos de las tazas turcas, los baños en el suelo que usan aquí. En este sentido, a los italianos no los gana nadie. Después de haber visto baños en el suelo, hileras de retretes para niños de preescolar y tazas turcas que se tapaban con una madera para funcionar como ducha, hoy hemos visto el culmen de la construcción en porcelana. El premio Roca se lo lleva este año el váter doble del sitio donde dormimos hoy, con una taza en frente de otra para que puedas compartir los mejores momentos del día con tus amigos.

Por la tarde, hemos podido tener un ratito a solas con el Señor expuesto y después hemos leído juntos el "Hablar con Dios" de hoy, que nos hablaba sobre que no debemos dejar de lado nuestros deberes como ciudadanos. El sacerdote que nos acogía hoy, el Padre Emilio, hablaba español, ya que es de origen sudamericano, y hemos podido tener hoy también por este motivo un rato de confesiones. Posteriormente hemos celebrado la Santa Misa.

Hoy hemos descubierto un equipo de cocina que no tiene parangón. Formado por Beto, Martí, Álvaro y Joan, nos han preparado una cena digna de restaurante de estrella Michelín. Unos espaguetis italianos con salsa de tomate sofrito, cebolla y carne picada. Xipi se ha mostrado como un maestro chef en el noble arte de picar alimentos a cuchillo y el resto del equipo como grandes dominadores de los secretos del fogón a la bombona. Para terminar, hemos tomado de postre un helado, a la vez que leíamos las crónicas de los días anteriores antes de ir a descansar para estar preparados para la dura etapa de mañana.